SUPER LUNA LLENA en Escorpio en el grado 7,
se le llama así porque se da muy cerca de la tierra. Esta lunación coincide con la
festividad de Vesak la más importante para el budismo, conmemora el nacimiento, la iluminación y la muerte de Gautama Buda, la fecha de los tres eventos coincidió con la luna llena que se da en este mes de Tauro.
Estamos en una semana crítica en todo el proceso de transformación y construcción que vivimos como humanidad. Este evento lunar se da en la polaridad fija Tauro-Escorpio. En Tauro tenemos un Stelliun de planetas, Sol, Venus, Mercurio y Urano y en la otra polaridad Escorpio está la Luna.
A través de la tradición budista podemos entender desde un punto de vista simbólico, la importancia del eje Tauro-Escorpio y como este nos conecta con la trascendencia de la materia y la espiritualidad. Comprendemos como el paso de Escorpio es necesario para alcanzar un estado más elevado de conciencia. A partir de Escorpio las siguientes energías que transitamos están más puestas al servicio del colectivo.
Para conectar con el amor incondicional o la compasión
y que estas sean un bien común, tenemos que dejar atrás el apego e identificación con nuestro cuerpo, mente y emociones, ya que no somos eso. Solo es un disfraz o vehículo para transitar por la materia.
Para conectarnos con la espiritualidad a través de la materia tenemos que estar encarnados. Es imposible hacerlo de otra forma. Como seres de luz o energía ya somos espirituales. A través de la vivencia profunda que nos ofrece la materia podemos alcanzar la iluminación. Todo es un continuo ciclo de nacimiento, crecimiento y muerte la cual nos lleva a un acto de transformación profunda de la materia para renacer otra vez como energía.
Cuando hablamos de Tauro nos referimos al cuerpo-materia, es la energía más fija de todo el zodiaco. Lo que comemos lo acumulamos formando un cuerpo. Al igual pasa con la mente que se forma a través de la acumulación de impresiones a lo largo de nuestra vida. El cuerpo es mío, pero no SOY YO, la mente es mía, pero no SOY YO. Entonces, ¿qué es ese YO?
Todo lo que acumulo es mío, pero no SOY YO. Yo existo más allá del cuerpo y la mente. Cuando soy capaz de vivir cada instante presente con la suficiente profundidad como para ir más allá de la naturaleza física, entonces estoy conectando de verdad con la espiritualidad.
Cuando nos anclamos y nos identificamos con cuerpo y mente se puede generar sufrimiento y drama
(muy de la energía de Escorpio). Hay que tener claro que existen dos tipos de sufrimiento el físico y el mental cuando podemos vivir experiencias más allá de estos términos entonces dejamos de sufrir. Si seguimos anclados en el miedo al sufrimiento no somos capaces de tomar decisiones valientes e ir a por todas en la vida, nos quedamos siempre a medias. Entonces nuestra vida en la materia (tauro) se convierte en un drama (escorpio).
Esta luna llena nos permite iluminar lo que acumulamos tanto física como mentalmente para no apegarnos a ello y no identificarnos, de esta forma podremos trascenderlo. Cuando estamos en ese YO que no es ni el cuerpo ni la mente entonces vivimos en profundidad pudiendo desarrollar todo nuestro potencial como SUPER HUMANOS.
Este sentir profundo tenemos que llevarlo a la experiencia del día a día, no solo quedarnos con la idea y exponerlo como un sistema de creencias dogmáticas, debería ser real. Sería interesante pasar cuanto más tiempo mejor en la profundidad de esa experiencia trascendiendo cuerpo, mente y emociones. Buscar que no nos controlen a nosotros, sino convertirnos en puros observadores sin entrar en el juicio. Dejando ir, soltando apegos.